[1] El Reino Unido toleraba a Metaxás porque su Gobierno favorecía los intereses económicos, políticos y militares británicos en la región.[2] En efecto, el Gobierno griego del general aseguraba el pago de la deuda externa y protegía las comunicaciones británicas en el Mediterráneo oriental.[5] El rey, Metaxás y el alto mando griego estaban decididos a afrontar cualquier agresión italiana, aunque si el ataque provenía de Alemania la unanimidad desaparecía.[6] No obstante, el ministro de Asuntos Exteriores conocía la actitud griega por los certeros informes del embajador en Atenas: Grecia pretendía evitar todo choque con Italia, pero estaba decidida a defenderse si la atacaban.[13] Por las mismas fechas, Grecia solicitó el envío de una misión militar para tratar la posible colaboración británica en la defensa del país.[18] Los alemanes ya solo esperaban al buen tiempo para emprender la ofensiva contra Grecia, aunque hubieron de cambiar los planes militares para incluir en la operación a Yugoslavia tras el golpe de Estado que se produjo allí el día 27.[18] La reticencia de los mandos griegos destinados en el frente albanés a replegarse hizo que el avance alemán hacia Yánina amenazase con impedírselo.[18] Los británicos atacaron desde el Olimpo el día 14, pero el embate fracasó y tuvieron que replegarse a las Termópilas.[20] El nuevo presidente del Gobierno no fue finalmente un militar, sino Emmanouil Tsouderos, que tomó posesión el día 20.[20] Ese mismo día el general Georgios Tsolákoglu se sublevó en Epiro y firmó un armisticio con el jefe de la 1.ª División Leibstandarte SS Adolf Hitler.[20] La evacuación de las tropas británicas comenzó al día siguiente, con la aquiescencia del Gobierno griego.[21] El territorio se dividió en sendas zonas de ocupación para Italia —la más extensa—, Bulgaria y Alemania —la menor, pero que incluía puntos estratégicos—.[21] La búlgara englobaba el territorio macedonio y tracio al este del Estrimón hasta la franja alemana fronteriza con Turquía.[23] La zona alemana dependía del mismo mando militar que Serbia, sito primero el Kifissia, cerca de Atenas, y luego en Salónica.[23] Hitler nombró asimismo un plenipotenciario para asuntos políticos, encargado fundamentalmente de las relaciones con el Gobierno colaboracionista griego que, sin embargo, casi siempre quedó sometido a las decisiones del mando militar regional.[24] La propaganda gubernamental fue fundamentalmente antibritánica el otoño de 1942, cuando se volvió cada vez más anticomunista y antieslava.[26] Grecia, al igual que la Ucrania soviética pero a diferencia de otros países ocupados en Europa occidental y septentrional, fue explotada sin miramientos por Alemania.[27] La flota mercante se compró a la mitad de su valor y las empresas interesantes, al sesenta por ciento.[26] Grecia producía cromo, bauxita, manganeso, molibdeno y níquel, minerales todos ellos cruciales para la producción de munición.[31] Ante tal situación, los sucesivos Gobiernos colaboracionistas griegos recurrieron a la emisión de dinero, con la consiguiente inflación, que acabó desbocada.[33] Los alemanes trataron asimismo de emplear trabajadores griegos tanto en la industria como en las labores asociadas al ejército.[34] Por añadidura, esto debía solucionar parcialmente el grave problema de paro que habían originado la guerra y la ocupación.[33] Este grano debía servir para abastecer a la nación durante el verano, y su ausencia desencadenó una crisis alimentaria.[46] Tanto Konstantínos Logothetópoulos como su sucesor en la presidencia del Gobierno colaboracionista, Ioannis Rallis, protestaron por las deportaciones y propusieron, con el apoyo del arzobispo Damaskinos aunque infructuosamente, que se internase a los judíos en una isla griega administrada por Italia.[51] El temor a un desembarco aliado en los Balcanes después de la derrota en África hizo que el Eje reforzase las defensas griegas.[53] Estos se sumaban a los 54695 búlgaros desplegados en el norte del país en agosto de este último año.[55] La Acqui perdió cuatro mil hombres en los combates con los alemanes y sus supervivientes fueron despachados al frente soviético.[1] EAM se limitó hasta 1943 a hostigar al Gobierno colaboracionista, planteando fundamentalmente reivindicaciones políticas y evitando chocar directamente con los ocupantes.[60] Ese mismo mes, ELAS llevó a cabo su primer asalto contra soldados del Eje.[60] Para final de año había bandas armadas en el Peloponeso, Tesalia, Macedonia y Tracia.
Infantes alemanes en Grecia en abril de 1941.
Las tres zonas de ocupación en las que se dividió Grecia tras la derrota militar de abril de 1941