Grandes Observatorios

Cada observatorio ha sido diseñado para usar las últimas tecnologías disponibles en su respectiva región del espectro.

El Compton observa en rayos gamma, los cuales simplemente no alcanzan la superficie.

Además tenía cuatro instrumentos, que se complementaban para obtener mejores sensibilidades, resoluciones y campos de vista.

Los rayos gamma se emiten desde fuentes muy energéticas, como agujeros negros y supernovas.

El Spitzer es difícil o imposible de imitar en tierra, y tiene pocos predecesores en órbita.

Combinando esto con su tamaño ligeramente mayor, un campo de visión favorable y su larga vida, los resultados científicos devueltos no tienen precedentes.

Los rayos X y gamma son más difíciles de detectar con las tecnologías hoy disponibles que la luz visible o ultravioleta.

El Hubble mientras tanto, no tiene un campo de visión suficiente como para estudiar todos los objetos interesantes del cielo, por tanto, los objetivos potenciales se localizan con observatorios terrestres (más baratos) o por observatorios espaciales menores, que a veces están diseñados para cubrir grandes áreas del cielo.

Además los otros tres Grandes Observatorios han encontrado nuevos objetos interesantes, los cuales merecen la atención del Hubble.

Luego se realiza una espectroscopia detallada por parte del Spitzer para determinar la composición química de la superficie, con la que se calcula el albedo y podemos reajustar el tamaño mínimo para nuestro objeto.

El Hubble también se beneficia de estar por encima de la atmósfera, ya que la atmósfera difumina las observaciones terrestres de objetos muy débiles, lo que disminuye la resolución espacial (sin embargo, los objetos más brillantes se pueden fotografiar en una resolución mucho más alta que el Hubble desde el suelo usando un interferómetro astronómico o óptica adaptativa).

Spitzer también observa en una longitud de onda en gran medida inaccesible para los telescopios terrestres.

Las observaciones infrarrojas son necesarias para objetos astronómicos muy distantes donde toda la luz visible se desplazamiento al rojo a longitudes de onda infrarrojas, para objetos fríos que emiten poca luz visible y para regiones oscurecidas ópticamente por el polvo.

En 2016, la NASA comenzó a considerar cuatro diferentes Grandes misiones científicas estratégicas en telescopios espaciales,[7]​ son la Habitable Exoplanet Imaging Mission (HabEx), Large UV Optical Infrared Surveyor (LUVOIR), Origins Space Telescope (OST), y Lynx X-ray Observatory.

Cuatro Grandes Observatorios
Perfiles de explosiones de rayos gamma registrados por el CGRO.
Imagen compuesta de Chandra, Hubble y Spitzer de la Nebulosa del Cangrejo (2009)