Aunque escrito con anterioridad, está situado temporalmente 30 años después del libro Fuego de la misma autora.
Las gracias varían totalmente ya sea del don de la lucha, esgrima, mentalistas hasta nadadores o simplemente hablar al revés.
Son muy pocos y encontrarlos es bastante inusual, se les teme por ser diferentes y, a menudo son explotados por sus extraordinarias habilidades.
Los nacidos con una gracia son llevados hasta el castillo del reino donde nacieron, y se los deja en los cuartos infantiles, donde son criados hasta que descubran su don y si es de utilidad para el rey, se queda totalmente a su servicio pero si no lo es, es devuelto a sus padres.
Durante el curso de una misión secreta, ella conocerá a Po, otro combatiente en gracia y que será la primera persona en igualar sus habilidades.