Nacido en Nápoles, vivió y trabajó durante muchos años en Bolzano.
En 1994, para el Messaggero dei ragazzi ilustró el wéstern Ray Cooper, con textos de Piero Fissore.
[1] El año siguiente, pasó al personaje policíaco Nick Raider, empezando así una larga colaboración con la editorial Bonelli.
En 1997 pasó a trabajar para otro cómic de la editorial Bonelli, la historieta del Oeste/terror Viento Mágico de Gianfranco Manfredi, trabajando en parejas con Bruno Ramella (Barbati realizaba los lápices, luego entintados por Ramella).
[3] Con Ramella realizó también historias de Shanghai Devil, del mismo Manfredi.