Gisela Valcárcel

En 1987 empezó a conducir el programa Aló Gisela, con el cual se hizo conocida y obtuvo altos niveles de sintonía gracias a los concursos telefónicos y entrevistas.

[2]​ Junto a Magaly Medina, según la Encuesta del Poder en 2008 y 2009, es considerada como una de las personas más influyentes en el Perú.

Fue bautizada como Sonia Mercedes Valcárcel; sin embargo, a los cinco años de edad, su padre realizó los trámites respectivos y le puso como tercer nombre "Gisela" por insistencia de ella.

Estudió en la Institución Educativa Teresa González de Fanning, en donde organizaba y actuaba en distintos espectáculos.

Alcanzó los 50 puntos de índice de audiencia como promedio con picos que pasaban los 70 puntos, algo nunca antes visto; es por ello que llegó a ser calificada como "La boda del año" o "La boda del siglo".

[12]​[13]​ Una vez acabado su matrimonio, Valcárcel entró en una etapa de búsqueda espiritual que la llevó a la India, en donde se reunió con algunos líderes religiosos, entre ellos Sai Baba y Deepak Chopra.

A su regreso, inició un romance con Bruno Cavassa, comentarista deportivo, relación que duró entre los años 2000 y 2001.

En el juicio, la animadora ganó y Medina fue sentenciada a tres años de prisión condicional.

Consistió en una exhibición de un vladivideo, el cual mostraba a la animadora con José Francisco Crousillat Carreño y Vladimiro Montesinos, en la sala del SIN en donde conversaron aproximadamente 1 hora.

En las imágenes se aprecia cómo este último le comunica a Gisela las medidas que debe tomar para impedir la difusión del libro La señito, escrito por su expareja Carlos Vidal,[18]​[19]​ en donde se revela aspectos íntimos de la vida de la animadora.

[22]​ Con esto se la acusó por delito contra la administración pública,[23]​[24]​ pero no entablaron juicio ya que el juez desestimó la denuncia, quedando absuelta de los cargos.

[25]​ En 2005, publicó su autobiografía Mi nombre es Gisela, donde narra su historia completa, altibajos e incluye fotografías inéditas.

El programa consistió en concursos para las amas de casa, las cuales podían llamar para ganar premios; además Valcárcel recibía y entrevistaba a personalidades del espectáculo, el deporte y la política.

Luego de ello condujo el tradicional programa desde un escenario en el campo de fútbol; este fue transmitido en directo al mediodía y tuvo como invitada principal a la cantante mexicana Alejandra Guzmán.

En 1999, participó junto a Guillermo Dávila en El submarino, obra teatral dirigida por Osvaldo Cattone.

[43]​ En 2009, marcada por una "situación coyuntural" que le autorizó alejarse de Panamericana,[44]​ condujo el reality El show de los sueños que se sintonizó vía América Televisión en horario nocturno.

[51]​ Para mediados del 2012, regresó con Operación triunfo, reality que fue también producido por su empresa y América Televisión.

[55]​ En mayo de 2014, Valcárcel regresa con Gisela, el gran show, que comprende el mismo horario con juegos como Mi hombre puede y entrevistas a personajes, programa con formato y tónica similares al que tuvo anteriormente.

Para su regreso a las pantallas en el 2008, Valcarcel reactivó su empresa de producciones televisivas y compró la franquicia a la reconocida empresa mexicana Televisa del programa Bailando por un Sueño, en el cual invirtió más de 300 mil dólares.

Durante 2011–12 produjo para Frecuencia Latina El último pasajero y las primeras cuatro temporadas de Yo soy.

En 2005, publicó su autobiografía: Mi nombre es Gisela, bajo el sello de Alamah del Grupo Santillana, en donde narra su vida desde su niñez, sus inicios como vedette, su entrada a la televisión como animadora del programa Aló Gisela y detalles sobre sus romances; el libro muestra 130 fotografías inéditas.