Girocronología

Desarrollado en 2007 por Sydney Barnes, astrónomo del Observatorio Lowell, este método considera la rotación de una estrella como un reloj astronómico, indicando con bastante precisión el tiempo transcurrido desde el nacimiento de la estrella.

Los márgenes de error típicos en las edades girocronológicas son del orden del 15%, mientras que los métodos anteriores de datación (método isócrono y cromosférico) presentan márgenes de error que se sitúan entre el 50% y el 100%.

La girocronología puede ser calibrada utilizando la edad conocida del Sol (4600 millones de años).

Otra característica distintiva de esta técnica es que funciona bien con la gran mayoría de estrellas, incluidas las estrellas de campo, es decir, aquellas que no se encuentran en cúmulos estelares.

No obstante, la girocronología no funciona bien para aquellas estrellas más jóvenes que no han empezado a fusionar combustible a un ritmo sostenido, característica de las estrellas pre-secuencia principal, ni para aquellas que en su evolución ya han abandonado la secuencia principal.