Junto con Tomaselli introdujo y difundió por Italia la fitosociología, desde principios de los años cincuenta.
Sus contribuciones fueron fundamentales en la contribución a la geobotánica, la cartografía vegetacional, ecología teórica y aplicada al campo de la conservación de la naturaleza, para las cuales ocupó múltiples y prestigiosas posiciones en el campo nacional y sobre todo internacional.
Nunca le gustó el ambientalismo ni el ecologismo, aunque reconoció sus muchos méritos, y sintió hostilidad a formar un partido político "verde".
Siempre defendió con firmeza la metodología y el rigor científico, a menudo combinados con los más profundos valores humanos y las cuestiones sociales.
Sus publicaciones sumaron más de 450 obras, entre las que se mencionan: "Sillabus Bryophitarum Italicarum" (1946), "La flora", (Edic.