El caso Gescartera fue un escándalo financiero ocurrido en España en 2001, en el que desaparecieron unos 20 000 millones de pesetas –más de 120 millones de euros– y que registró más de 2000 afectados, incluyendo mutualidades públicas, fundaciones, ONG, congregaciones religiosas y empresas públicas.
Gescartera era una sociedad gestora de carteras (SGC) creada en 1992.
En 1999, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sancionó a Gescartera con una multa de carácter grave por resistirse a ser inspeccionada.
El fiscal consideró que durante sus nueve años de actividad, Gescartera se dedicó a realizar actividades para lucrarse defraudando a sus clientes, desviando dichos fondos hacia sociedades de constitución fraudulenta para así hacerlos suyos.
[3] En 2012 el Tribunal Supremo absolvió al asesor fiscal Julio Rodríguez Gil, al propietario de Asesoría y Gestión de Patrimonios (AGP) Aníbal Sardón, y dos empleados de La Caixa, José Alfonso Castro Mayoral y Miguel Carlos Prats.