Fue el responsable de la política del gobierno en materia social y sindical, siguiendo la tradición de notorios dirigentes radicales como Crisólogo Larralde y Moisés Lebensohn.
La medida fue resistida por el Partido Justicialista, lo que motivó fuertes enfrentamientos con el gobierno nacional.
[1] Tras el fallecimiento del Ministro de Defensa Roque Carranza, Alfonsín buscó un funcionario de su máxima confianza para ese puesto, ya que hacía muy poco tiempo se había llevado adelante el Juicio a las Juntas y se buscaba continuar enjuiciando a militares de menos graduación, al mismo tiempo que garantizar la lealtad de las Fueras Armadas.
Por ello se tomó cinco días y terminó por nombrar para el cargo a su amigo Germán López.
[4] Durante los años siguientes siguió siendo asesor personal del presidente Alfonsín y vio gradualmente resentida su salud, en un proceso que desembocó en su fallecimiento, ocurrido en septiembre de 1989.