Alcanzó fama mundial tras la campaña de 1989, en la que fue bota de plata del fútbol europeo, tras marcar 35 goles en la Bundesliga austriaca, por detrás del mexicano Hugo Sánchez del Real Madrid y del búlgaro Hristo Stoichkov del Barcelona, que compartieron la bota de oro.
[2] Esta efectividad goleadora le valió su traspaso del Admira Wacker al Atlético de Madrid por una gran suma de dinero.
Tras un par de campañas en las que no rindió como se esperaba, jugando con el portugués Paulo Futre, el alemán Bernd Schuster y Donato Gama da Silva, fue de nuevo traspasado al SK Rapid de Viena, pese a que ganó con el conjunto colchonero la Copa de S.M.
[3] Falleció en Traiskirchen, una localidad situada al sur de Viena, atropellado por un tren de alta velocidad.
[5] El Atlético de Madrid[6] ha mostrado sus sinceras condolencias.