Sus miembros aparecen en los registros desde finales del periodo republicano, aunque el primer miembro conocido es Lucio Roscio, embajador en el año 438 a. C.[1] El más famoso de sus miembros fue Sexto Roscio de Ameria, defendido por Cicerón en tiempos de Sila.
[2] En época imperial varios de sus miembros alcanzaron el consulado.
[3] Los Roscios conocidos llevaron los praenomina Cayo, Lucio, Marco y Tito.
[4] Bajo la República, se conocen los cognomina Fabato y Otón, que llevaron miembros de la aristocracia senatorial, y Magno y Capitón, referidos en el juicio a Sexto Roscio.
[3] Una familia de Roscios de época imperial llevó los cognomina Eliano, Murena y Páculo.