Jugó durante tres temporadas con los Billikens de la Universidad de San Luis, en las que promedió 11,2 puntos y 10,3 rebotes por partido.
En su primera temporada como profesional destacó unmo un excelente reboteador, acabando la temporada con 13,7 puntos y 10,8 rebotes por partido,[5] que le colocaron como el séptimo mejor reboteador de la liga,[6] y que le sirvieron para ser incluido en el Mejor quinteto de rookies de la ABA.
[7] Al año siguiente disputaría la mejor temporada de su carrera, promediando 17,7 puntos y 12,1 rebotes por partido,[8] que le sirvieron para disputar su único All-Star Game, en el que disputó 12 minutos, consiguiendo 4 puntos y 4 rebotes.
[4] en su primera temporada en el equipo tejano mantuvo unos buenos números, promediando 13,4 puntos y 10,1 rebotes por partido,[10] Pero bajó su rendimiento al año siguiente, siendo traspasado a New York Nets a cambio de Manny Leaks.
Allí disputó dos temporadas hasta que se convirtió en agente libre, fichando por los Spirits of St.