Son pequeños animales nocturnos de África, muy abundantes, que se distribuyen en seis géneros y diecinueve especies.
[2][3] Los gálagos son conocidos con el nombre de nagapies en afrikáans, que significa "monos nocturnos".
Los gálagos tienen ojos grandes que les proporcionan una buena visión nocturna, además de otras características, como extremidades posteriores fuertes, audición aguda y colas largas que les ayudan a mantener el equilibrio.
Cuando saltan a través de los espesos arbustos, pliegan sus delicadas orejas hacia atrás para protegerlas.
Al cabo de unos días (6-8), la madre carga a la cría en la boca y la coloca en ramas adecuadas mientras se alimenta.
Las crías son alimentadas por la madre durante seis semanas y pueden comer solas a los dos meses.
Las crías crecen rápidamente, a menudo haciendo que la madre camine torpemente mientras las transporta.
Así pues, los grupos sociales están formados por hembras estrechamente emparentadas y sus crías.
Los machos que no han establecido tales territorios a veces forman pequeños grupos de solteros.
Los gálagos mayores de un grupo prefieren descansar solos, mientras que los más jóvenes están en contacto constante entre sí.
Por otro lado, las crías intentan permanecer cerca de la madre e iniciar interacciones sociales con ella.
[11] En pleno vuelo, recogen los brazos y las patas cerca del cuerpo; los sacan en el último segundo para agarrarse a una rama.
[5] Estos movimientos fuertes, complicados y coordinados se deben a la mitad rostral del córtex parietal posterior que está vinculado a las áreas motora, premotora y visuomotora del córtex frontal.
[13] Los chimpancés, que usan palos para atrapar termitas, intentaron alancear gálagos ocultos en su madriguera, oliendo la punta de sus lanzas después para ver si habían derramado sangre.
Se ha descrito clasificaciones en ITIS (2011)[16] y NCBI (2011)[17] La filogenia de Galagidae ha sido estudiada por Masters et al., 2017 como sigue:[20] Euoticus Galagoides Galago Paragalago Otolemur Sciurocheirus