En 1944 viaja a Estados Unidos como becario de la Fundación Guggenheim.
La experiencia de estos tres años lo inclinan definitivamente por la investigación científica en cáncer, tema al que dedicará todas sus potencialidades con singular intensidad durante cuatro décadas.
En 1960 es designado director del Departamento de Oncología, cargo que ocupa hasta 1965, cuando se radica definitivamente en Estados Unidos, contratado por la Universidad de Pensilvania.
Entre sus múltiples trabajos, destaca el llamado "Interacción de plaquetas y células tumorales en la rata", publicado en el International Journal of Cáncer en 1973, y que fue incluido en el Year Book of Cancer, en 1975.
En 1989 se le otorgó el premio Paget-Ewing de la "Metastasis Research Society", que se entrega a los científicos que han realizado contribuciones destacadas en esta patología.