Fueron vistos por vez primera en 1984 durante la guerra de Afganistán.
La versión inicial fue denominada BG-15 y fue instalada bajo el cañón de los fusiles AK-74.
El desarrollo continuó durante la década de 1970 y en 1978 fue adoptado en servicio.
El gas caliente que se expande al encenderse la mezcla propulsora es forzado a través de aberturas en la base de la granada, implusando a esta a través del cañón y al mismo tiempo obligando a la banda de guía que se encaje en las doce estrías de este.
La mayor diferencia con respecto al M203, aparte de la arquitectura, es que se recarga por el cañón y no por la recámara, como el modelo estadounidense.
Ahora existe una serie de granadas diseñadas para emplearse a diferentes alcances llamadas GRD-50, GRD-100 y GRD-200, para emplearse a 50, 100 y 200 m respectivamente.