Su fundación se remonta el testamento del empresario y fundador de la empresa Ludwig Schunk (1884 – 1947).
Mediante el preámbulo y la finalidad de los estatutos, la Ludwig-Schunk-Stiftung está también vinculada formalmente a las condiciones correspondientes del testamento.
Por este motivo, las sociedades operativas han de hacer todo lo posible por obtener y asegurar beneficios adecuados.
Sin embargo, según el sentido y la letra del testamento solo se pueden distribuir los beneficios a los empleados si se dispone de medios para el aseguramiento del futuro.
Solo está comprometida a cumplir las disposiciones, las condiciones testamentarias y los estatutos.