Francesco Tiberi

Desde 1809 hasta 1814, durante la invasión napoleónica de Italia, sería encarcelado.

En el año siguiente sería nombrado delegado apostólico en Macerata, Camerino y Loreto.

En 1816 sería nombrado auditor del Tribunal de la Rota, donde ejercería hasta 1826.

En este día, también fue nombrado obispo de Iesi en Italia.

[4]​ En 1834 volvió a Roma,[5]​ bajo la excusa de visitar a Gregorio XVI, pero alejándose de una España inmersa en la Primera Guerra Carlista.