Frédéric Schiffter nace en el Alto Volta (actual Burkina Faso).
Su reflexión, esencialmente crítica, se declina en tres conceptos clave: el «chichi», el «blabla» y el «gnangnan».
1- El «chichi» (concepto tomado de Clément Rosset[3] en su libro Le Réel et son double[4]) designa la actitud consistente en no percibir lo real o en desacreditarlo por la propia crueldad - de su esencia trágica.
3- El «gnangnan» califica una forma de altruismo cuyo resorte es la indignación mezclada de sensiblería contra lo trágico que golpea a las multitudes humanas y rebautizada con el «Mal» (terrorismo, catástrofe natural, guerra civil, epidemia, etc.).
Dando lugar a muchos «blablas» morales, políticos, religiosos, mediáticos, entre otros, el «gnangnan» permite a los individuos, dirigidos en tiempo ordinario hacia el hedonismo egoísta y consumista, sentirse buenos, justos e indispensables - del lado del Bien.