Fosse Way fue una calzada romana de Inglaterra, que unía la actual Exeter (Isca Dumnoniorum), en el suroeste de la isla, con Lincoln (Lindum Colonia), en East Midlands, pasando por Ilchester (Lindinis), Bath (Aquae Sulis), Cirencester (Corinium) y Leicester (Ratae Corieltauvorum).
Esta denominación responde a que en las primeras décadas tras la conquista romana de Britania (en el año 43) la Fosse Way marcaba la frontera oeste de los territorios bajo influencia romana.
De hecho, es posible que el camino surgiese en origen como una zanja defensiva, que posteriormente se rellenó y se convirtió en calzada, o que el foso defensivo se extendiese cercando parte de la ruta.
Fosse Way es la única calzada romana que conserva su nombre original en latín, puesto que la mayoría de ellas han sido renombradas por los anglosajones.
Muchas partes de la Vía del Foso todavía existen y forman parte de modernas carreteras: El recorrido entre Leicester y Lincoln, que se extiende por la ruta A46, sigue el plano original de la Vía del Foso.