Se jugó en el Estadio Aviva, Dublín, Irlanda, el 18 de mayo de 2011.
Debido a las normas de la UEFA contra el patrocinio de las empresas que no pertenecen a la federación, al estadio se lo conoció como el Dublín Arena para la final.
El partido fue protagonizado entre los equipos portugueses de Fútbol Club Oporto y Sporting Clube de Braga.
El FC Oporto se coronó campeón al vencer al SC de Braga por 1-0 con gol de Radamel Falcao García.
Cuando el estadio de Wembley fue anunciado como el anfitrión para la final de la Liga de Campeones, el Estadio Aviva se eligió como sede ya que la misma nación no puede albergar las finales de ambos torneos continentales en el mismo año.