Filomela

Este accedió pero con la condición de que el encuentro se llevara a cabo en Tracia.

Además, para que Procne nunca se enterara de su reprobable acción, le cortó la lengua y la encerró en una solitaria prisión en el bosque.

En su solitaria prisión tejía sobre un lienzo blanco y con hilo púrpura la triste historia de su vida.

Así fue como Procne se enteró de que su esposo la había engañado, pues su hermana todavía vivía.

Él comió sin advertir nada, hasta que, cuando hubo terminado, reclamó la presencia de su hijo.

Fue entonces cuando Procne exclamó satisfecha "tienes dentro a quien reclamas"; y Filomela irrumpió con la cabeza del desdichado Itis.

Cuando en el mito de Ovidio una sirvienta ayuda a Filomena, en los romances suele ser un pastor quien cumpla ese rol.

El nombre de Tereo se transforma en los romances tomando numerosas variantes, siendo la mayoría absolutamente distintas del original.

Como se aprecia, muchas versiones identifican al villano Tereo con los moros y turcos, sea por identificación de la antigua Tracia con Turquía, por alcance fonético o tendencia a adjudicar maldad a extranjeros, máxime de otras religiones, lo que no es raro, considerando que Tereo simboliza al extranjero bárbaro en el mito griego original.

Otra derivación religiosa es que en romances iberoamericanos el personaje del rey ateniense Pandión, que en general en español se reemplaza por una mujer (suegra del violador y madre de las hermanas), es adjudicado muchas veces a una santa.

Óleo sobre lienzo de Elizabeth Jane Gardner :
Filomela y Procne ( Philomena and Procne ).
La chilena Violeta Parra difundió la tonada Blanca Flor y Filumena , una de las versiones más conocidas del mito de Tereo, conservado en múltiples formas por la tradición oral iberoamericana.