El NSF es causado por la exposición al gadolinio en los agentes de contraste de resonancia magnética (GBCA) basados en gadolinio en todo tipo de pacientes y es una enfermedad que debería evitarse no usando esas inyecciones y advirtiendo a los pacientes.
Los síntomas se inician distalmente en las extremidades y progresan de manera proximal, a veces afectando el tronco.
Si bien la afectación de la piel está en primer plano, el proceso puede involucrar cualquier órgano, por ejemplo, el ojo, corazón, diafragma, pleura, pericardio y riñones, así como los pulmones y el hígado.
Se han intentado múltiples terapias para NSF, con una mejoría clínica variable.
Ninguno ha sido tan efectivo como la restauración de la función renal.