Nace en una familia de campesinos pobre, su padre, Márton Móra era un peletero remendón, más tarde se hizo artesano, su madre, Anna Juhász era panadera.
Éste fue prácticamente el único periódico que no se puso al servicio de la propaganda bélica mundial.
Tras la muerte de István Tömörkény en 1917 pasa a ser director del museo.
Sus artículos, cuidadosamente redactados y sus folletines construidos con coraje perfectamente estilístico, aparecen en las columnas del periódico de Szeged "Délmagyarország".
Un excelente don narrador, un humor sereno y un estilo húngaro mundano cercano al lenguaje corriente caracterizan su prosa.