)[1][2] Esta frase aparece en forma lírica cantada anualmente en el pregón de la Vigilia Pascual: "O felix culpa quae talem et tantum meruit habere redemptorem," "¡Oh feliz la culpa que mereció tal Redentor!
El santo Católico Ambrosio habla también de afortunada ruina de Adán en el Jardín del Edén en tanto que su pecado trajo a la humanidad un mayor bien que si se hubiera mantenido perfectamente inocente.
[6] En un contexto literario, el término "felix culpa" puede describir cómo una serie de eventos desafortunados puede llevar eventualmente a un resultado más feliz.
También es el tema del texto en inglés Adam lay ybounden, de autor desconocido del siglo XV, y es usado en varias formas, como en las frases "Foenix culprit", "Poor Felix Culapert!"
Aunque por lo general se discute históricamente, aún hay filósofos contemporáneos, tales como Alvin Plantinga, que defienden la teodicea de felix culpa.