Pasó a la fama tras chutar un penalti de forma poco habitual y que actualmente se conoce como la ezequinha.
Volvió al Real Betis en cadetes, y tras unos buenos años en sus filas, Ezequiel recalaría de nuevo cedido en las categorías inferiores del Granada CF donde consiguió el ascenso con el equipo juvenil la temporada 2008/09.
Pasó a formar parte del primer equipo y firmó por 4 temporadas.
Tras la experiencia germana y, tras confirmarle el técnico verdiblanco Pepe Mel que no tendría hueco en la plantilla bética para la temporada 2013/14, se marchó cedido al Recreativo de Huelva, como parte del acuerdo del traspaso de Chuli, el descenso del betis a la Segunda División Española provocó que su contrato con el equipo bético quedara rescindido, quedándose sin equipo, posteriormente fue ofrecido al Cádiz.
En enero de 2015, tras varios meses como agente libre, Ezequiel firma con el FC Penafiel portugués.