Su salto a la élite internacional se produjo en 1995, cuando finalizó en cuarta posición del heptatlón en los Campeonatos del Mundo de Gotemburgo, haciendo su mejor marca personal con 6.340 puntos, y mejorando sus registros en seis de los siete eventos que componen el heptatlón.
En estos Juegos participó también en salto de longitud, aunque no pudo clasificarse para la final.
Sin embargo una lesión le obligó a abandonar la prueba después de cinco eventos.
En 2004 sufrió numerosos problemas físicos, sobre todo en los isquiotibiales de su pierna derecha, lo que le impidió competir con normalidad durante la temporada.
Sí lo hizo en el salto de longitud, aunque no logró clasificarse para la final.