Por ella transitan tanto trenes regionales como los cercanías de la línea R del Transilien.
La estación fue inaugurada a mediados del siglo XIX por parte de una compañía local aunque rápidamente acabaría en las manos de la Compañía de Ferrocarriles París-Lyon-Mediterráneo.
En 1938, la compañía fue absorbida por la recién creada SNCF.
Ubicada en un importante nudo ferroviario la estación forma parte del trazado de la línea férrea París-Marsella (PK 78,627) y del trazado de las siguientes líneas férreas: Esta estación se compone de cinco andenes al que acceden seis vías.
Por ello es necesario usar un paso subterráneo para acceder al resto de vías (andenes 2,3,4 y 5).