Tras varios años de obras, la línea Valladolid-Ariza fue abierta al tráfico en 1895.
En 1941, con la nacionalización del ferrocarril de ancho ibérico, las instalaciones pasaron a manos de RENFE.
En 1969 la estación fue reclasificada como un apeadero-cargadero sin personal y algún tiempo después, en 1975, fue rebajada a la categoría de apeadero sin personal.
En esa misma fecha el resto de la línea quedó cerrada al tráfico de pasajeros,[5] siendo clausurada en 1994.
En la actualidad las instalaciones se encuentran abandonadas y en mal estado de conservación.