Ruta de los Dólmenes

Tiene una estructura geológica formada por materiales provenientes de erupciones volcánicas submarinas como son las lavas almohadilladas, también llamadas Pillow-Lavas y rocas volcánicas, aunque al oeste predominan las calizas arenosas, margas y margocalizas.

Junto a los monumentos funerarios de época Neolítica-Calcolítica se han hallado elementos habitacionales pertenecientes a la Edad del Bronce que interfieren en los funerarios, lo que indica un cambio cultural y costumbrista en esas sociedades.

El conjunto está formado por grandes rocas redondeadas que además están algunas de ellas al lado del otras tomando la apariencia de una estructura y hay una roca que emerge como monolito o menhir.

Pertenece al período Neolítico-Edad del Bronce (4.000-1.500 a. C.) con una cronología por carbono 14 (C14) de 5.000 – 1.000 cal BC.

El monumento está deteriorado por haber sufrido saqueos y la reutilización de sus materiales para otros usos.

Identificado por Barandiarán en 1920 fue excavado por él junto a Telesforo Aranzadi y Enrique Eguren un año después.

En 2016 Jesús Tapia y Manu Ceberio localizaron volverlo a identificar ya que pasaba desapercibido entre las irregularidades del terreno confirmándolo al año siguiente.

Se identificaron tres losas camerales de las cuales una de ellas estaba tumbada pero en su lugar y las otras dos removidas de sus ubicaciones originales, hay otra losa que se denomino "losa 2", que en un principio se creyó cameral pero resultó ser parte del túmulo, que forma parte del túmulo.

En estas excavaciones no se pudo acceder a la cámara ya que sobre ella ha crecido una haya de gran porte.

Fue señalado por Barandiarán en 1920 y estudiado un año después por él mismo junto a telesforo Aranzadi y Enrique Eguren no se halló ningún material arqueológico a excepción de una piedra de chispa.

[6]​ Situado en el término municipal de Vergara, el dolmen de Irukurutzeta es monumento funerario que data del periodo histórico Neolítico y Edad del Bronce (4.500-1.500 cal BC).

La cámara, de la que solo se conserva un ostrato, está desplazada respecto al centro del túmulo.

Se han hallado varias piezas prehistóricas y algunas otras de periodos más recientes.

El ostrato existente, una losa cameral, ha sido movida en diferentes ocasiones, en 2019 se ubicó de forma vertical y se rellenaron los huecos con las tierras procedentes de las excavaciones realizadas.

Este dolmen está desviado hacia el suroeste de la línea principal del recorrido.

Se distinguen dos usos diferenciados, uno el funerario en época neolítica y otro habitacional en la Edad del Bronce.

En la excavación se hallaron diferentes materiales que se documentaron atendiendo a su procedencia estratigráfica, reflejando su posición sobre la cartografía generada y mediante el empleo de una Estación Total Leica TCRM1205, procediendo a su estudio en detalle posterior.

Se observa el uso de sílice volcánica, variedad local, en sustitución del sílex para algunas piezas.

Esta área, de usa habitacional y correspondiente a la Edad del Bronce, cronología (C14) 2.000-1.000 cal BC, se ubica al borde noreste del túmulo del monumento megalítico al que se le realiza un corte, cerca de ella, en el dolmen Kurutzebakar, se encontró otra similar.

Existe la posibilidad de que la planta original fuera diferente a la interpretada.

Se han observado distintas unidades estratigráficas cuya complejidad aumenta con la profundidad.

El uso habitacional tan cercano al monumento funerario indica el cambio de costumbres y cultura entre los habitantes de diferentes épocas, por un lado el Neolítico y Calcolítico y por otro la Edad del Bronce, donde se aprecia una pérdida del respeto, temor o valor simbólico de la tumba.

El monumento ha sido dañado recientemente, como se puede observar mediante la Carta arqueológica de 1982.

En 2018 Bazeta, Tellería y Aguirre, basándose en los datos de Ceberio, hicieron una restauración integral dándole el aspecto actual.

Sobre el túmulo se han encontrado restos de losas que podrían pertenecer también a la cámara dolménica.

Los cinco ortostatos que conformaban la cámara estaban apoyados o imbricados entre sí formando una estructura trapezoidal cuyo eje mayor tiene una orientación noroeste-sureste.

Tres de las losas camerales se han mantenido en su lugar original, mientras que de las otras dos se han encontrado restos sobre el túmulo pero también en el mantenían trozos en su ubicación original.

[11]​ Tras el estudio llevado a cabo en 2019, y siendo este el único dolmen del conjunto que puede ser reintegrado por completo, se propusieron tres opciones de restauración, dejar las losas en el lugar donde se encontraron, poner las losas UE4.4 y UE4.6 en sus respectivos lugares, parte oeste y cubierta tras recomponerlas de alguna forma y poner las losas en sus lugares haciendo una reproducción un poco mayor (el 20% mayor) de la cubierta para darle mayor estabilidad.

No obstante se han tenido que añadir unos refuerzos metálicos en la losa 2 al detectarse grietas en ella.

La losa 4 se ha colocado sin haber sido reconstruida, ya que el estado de exfoliación lo ha impedido.

Menhir de Arribiribilleta.
Dolmen Irukurutzeta en enero de 2010.
Dolmen Kerexetaegia Hegokoa en enero de 2010.
Dolmen Frantsesbasoa en enero de 2010.
Dolmen Agerreburu en enero de 2010.