La estación es un importante punto de enlace nacional e internacional con múltiples líneas locales, regionales e internacionales, incluyendo conexiones a Moscú (línea directa), Copenhague, Nápoles, Londres y otros destinos, con una línea de alta velocidad, el tren Thalys, hacia París vía Bruselas.La estación es, en su núcleo, un bello edificio de hierro forjado del siglo XIX; su arquitectura se divisa especialmente bien desde el puente de los Hohenzollern.Tres arcos de hierro recubren los andenes.El arco central, en su momento el más grande de los existentes, recubría con sus 64 m de luz los andenes que hoy llevan los números 2 a 7.Durante la II Guerra Mundial, la estación fue destruida en gran parte, lo mismo que el puente.