Espiridón de Tremitunte

Permaneció en su destierro durante algunos años, hasta que, tras la muerte de Maximino, pudo volver a Chipre, donde volvió a trabajar como pastor de ganado.

Cuando asumió el cargo de obispo, no abandonó su modo de vida modesta; siguió pastando ovejas y trabajando en el campo.

En 1589 las reliquias fueron depositadas en el templo, donde se encuentran hasta ahora.

Sus reliquias reposan bajo la custodia de la Iglesia ortodoxa helénica en el templo que lleva su nombre, en Kérkyra, Durante largo tiempo, la mano derecha del santo reposó en Roma, regalada al papa Clemente VIII en 1592, y guardada en la iglesia de Santa María in Vallicella.

Los isleños celebran su homenaje cinco veces al año.

San Espiridón es uno de los santos más venerados en la Iglesia ortodoxa y se acude a él en los casos de dificultades económicas, intervención quirúrgica y enfermedades oncológicas.