Según la interpretación oficial, el León es una señal frecuente del grupo étnico nord-sudanés, al cual pertenece la mayor parte de los senegaleses.
Antes de la presencia francesa, era el animal simbólico del Poder; el rey era, pues, un rey-león-sol-dios.
A partir de la independencia se convertirá en el animal simbólico del Estado, alusivo al coraje y la lealtad del pueblo senegalés.
El baobab, por su parte, es un árbol típico de la flora senegalesa.
Además, es un árbol del que se extraen diversos productos alimenticios y fibra para confeccionar cuerdas sólidas.