La octava participación escocesa fue la mejor de la década, con la selección alcazando la fase final; objetivo no logrado en Nueva Zelanda 2011 ni en la siguiente Japón 2019.
El director técnico fue el kiwi Cotter (53 años).
Escocia integró el grupo B con los candidatos Springboks, los Águilas, Japón y Samoa.
Los cuartos los cruzó ante los favoritos Wallabies, dirigidos por Michael Cheika, quien diagramó: Stephen Moore (capitán), Rob Simmons, la estrella David Pocock, Will Genia, el veterano Matt Giteau y Adam Ashley-Cooper.
En un partido vibrante de ocho tries, Australia ganó con un polémico penalti tardío.