En esta zona se encuentran los estanques salineros d'en Marroig.
A poniente se encuentra la playa de es Cavall d'En Borràs.
Está formada por pequeños montículos rocosos unidos por lenguas de arena abiertas a levante y poniente y que, en invierno, el oleaje puede llegar a romper la península en estos puntos.
Es un espacio singular construido por el alemán Johannes Schultz con piedras y materiales abandonados en la costa.
Comenzó la creación en 1992, y cada año lo ha ido renovando, creando un espacio de formas sugerentes e imaginativas.