Ernesto Santana

Trabajó como asesor en talleres literarios para aficionados y como escritor radial.

Trabajó como asesor en talleres literarios para aficionados y como escritor radial.

Aunque ha escrito principalmente cuentos, publicó en 2002 la novela Ave y nada, que forma parte de una historia mayor, repartida en varias novelas cuya base es la ciudadela Urbach, una especie de falansterio fundado por una comunidad de personas a principios del siglo XX, pero en la época en que transcurre Ave y nada, 1986, todo aquello ya es algo remoto.

Una ciudadela ya entraña lo marginal en sí misma: es una construcción que, en su origen, era otra cosa y ha degenerado en ciudadela porque sus dueños y primeros pobladores la han abandonado.

Tanto en sus novelas como en sus cuentos explora un realismo que intenta ir más allá de una descripción directa de la realidad y se interna en lo onírico y en lo fantástico.