La ermita de San Roque fue un templo de la ciudad española de Segovia, ya desaparecido.
[1] La ermita, situada en lo que ahora se conoce como paseo de Ezequiel González, estaba dedicada a san Roque, patrón de los contagiados por epidemias, pues se le agradecía que hubiese librado a la ciudad de la peste que la asoló en 1599.
[1] Aparece descrito en Las calles de Segovia (1918) de Mariano Sáez y Romero, en el epígrafe dedicado a la vía, con las siguientes palabras:[1]