[1] Reside en su interior la imagen de la Virgen del Canto que se trata de una escultura del siglo XII (denominada también “La Dueña”) y es la patrona de la ciudad.
La ermita es un edificio que poee una planta de cruz latina, con tramo central muy alargado.
Posee una cúpula de media naranja en su crucero.
Este crucero se llegó a reedificar tras la Guerra de la Independencia española.
El retablo de su interior es de estilo barroco, elaborado del primer tercio del siglo XVIII.