La literatura formal sobre los equipos rojos es relativamente limitada,[1] pero los principios se abordan en diferentes contextos y se han propuesto aplicaciones tanto en sectores civiles, como en los de la investigación científica.
En los Estados Unidos su empleo ha aumentado significativamente a partir del 2003, cuando el Defense Science Review Board lo recomendó para prevenir la repetición de circunstancias que hicieron posibles atentados como los del 11 de septiembre de 2001, llevando al nacimiento del Army Directed Studies Office en el 2004.
En las simulaciones militares de Estados Unidos, por ejemplo, la facción que personifica la defensa estadounidense siempre se conoce como Blue Team (Equipo Azul), y el adversario como Red Team (Equipo Rojo).
[4][5] Compañías como Microsoft[6] ejecutan simulaciones regularmente utilizando red teams.
Estos equipos rojos están certificados por la Agencia de Seguridad Nacional y acreditados por el Comando Estratégico de Estados Unidos,[7] lo que les permite operar ataques a la infraestructura del Departamento de Defensa para identificar cualquier vulnerabilidad.