Epifrón

En la mitología clásica Epifrón (en latín Epiphron), abstracción divina utilizada sólo por Higino, era la personificación de la «prudencia» o la «sensatez».El autor lo imagina como uno de los hijos concebidos por el Érebo y la Noche, como la mayoría de estas deidades que representaban las cualidades y defectos humanos.Nótese que Higino, aún siendo un autor latino, no intenta traducir algunas abstracciones del griego —como sucede con Némesis, Eufrósine o Epifrón—, dejando como resultado la grafía latinizada; Epiphron es la transcripción cruda de Ἐπίφρων (Epíphrōn).[1]​ Acaso Higino se basase en la Moderación (Σωφροσύνη, Sōphrosýnē), otra de las abstracciones poéticas.[2]​ Es por ello que esos tres adjetivos divinos se pueden encontrar traducidos como «el que afloja los miembros (lysimeles), el sensato (epiphron) y el de dulces miembros (hedymeles)».