Se trata de una eparquía greco-católica ucraniana, inmediatamente sujeta a la Santa Sede.
[nota 1] La eparquía extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito bizantino greco-católico ucraniano residentes en Francia.
[1] El eparca es además delegado apostólico para los greco-católicos ucranianos en Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo y Suiza.
El metropolitano Andrey Sheptytsky envió al sacerdote Jacques Perridon como superior de la misión en Francia.
En 1939 la Santa Sede designó al obispo Ivan Buchko como visitador apostólico para los greco-católicos ucranianos de Europa occidental.