Entidades de tenencia de valores extranjeros

En el caso español, los beneficios fiscales son muy importantes: están exentos de pago la entrada y la salida de capitales, los dividendos, beneficios y plusvalías generados por las empresas extranjeras participadas por las ETVE.Únicamente la inversión que realicen para desarrollar su actividad dentro de España queda sujeta a tributación; en cambio sí que pueden deducirse gastos.Otros requisitos son el mantenimiento de la inversión durante un año y que el origen sea industrial o comercial.Las ETVE supusieron casi los dos tercios de la inversión total en España en 2002, y desde entonces su importancia ha disminuido hasta llegar al 22% en 2010.[1]​ El caso de ExxonMobil Spain ha sido considerado particularmente significativo, llegándose a considerar su utilización de la figura de la ETVE como equivalente a la de un paraíso fiscal.