[5] La sede social se encontraba en Roma, aunque la dirección general y los servicios de producción fueron ubicados en Turín.
[6] También obtuvo del Estado italiano numerosas ayudas económicas para la adquisición y renovación de equipo radiofónico.
Para 1934 la EIAR contaba con unos 438.783 abonados a su servicio, lo que suponía poco más del 1% de la población italiana.
[10] El régimen aprovechó el gran seguimiento radiofónico de los eventos deportivos —especialmente el fútbol— retransmitidos en directo, y usó este medio para narrar las manifestaciones públicas del fascismo.
[11] Durante la mayor parte de su existencia la presidencia del organismo recayó en Giancarlo Vallauri.[n.