Estudió en la academia Julian, teniendo a Bourdelle como profesor.
Posteriormente completó su formación gracias a distintos viajes realizados por Italia, Bélgica, Holanda, Austria, Alemania, Inglaterra y Portugal.
En 1937 participa en la Exposición de Arte Vasco en París.
Su obra más polémica fue la escultura de la nueva musa destinada a sustituir en 1948 a la creada por Francisco Durrio de Madrón para el monumento a Arriaga del bilbaíno parque Casilda Iturrizar.
Sus últimos años abandonó parcialmente la labor escultórica, para dedicarse a la pintura.