En este sentido, desde 2010, al finalizar el encierro los toros son guiados hasta un solar privado denominado la Tórtola (C/ General Herrera) donde son sacrificados a puerta cerrada por un profesional taurino, en lugar de realizarse en público como se hacía anteriormente a dicha fecha.
[4] En 2012, los toros Mentiroso, con el número 60 en el lomo, y Descuidado, con el 70, fueron los protagonistas del primer encierro fernanduco con la declaración de interés turístico regional.
[8] Respecto a la cronografía del festejo, los animales son transportados en cajones precintados desde la ganadería (generalmente proceden de Víctor y Marín, una ganadería local) hasta el punto de inicio situado en la Avenida Alcalde Macario Dorado, frente al edificio del Casino.
[9] Situados en dicho punto y llegada la hora estipulada, se lanzan los cohetes anunciadores y se prosigue a la apertura a la vez de ambas cajas, hecho que da inicio al encierro.
Una vez iniciado, éste tiene una duración de dos horas y transcurre dentro del recinto acotado, sin una trayectoria fija.