Fue inventado por el ingeniero británico Roger Shawyer, fundador de la compañía Satellite Propulsion Research Ltd (SPR) en el año 2000 para desarrollar su proyecto.
[1][2] El motor usa un magnetrón para producir microondas que son dirigidas a un recipiente metálico, cónico, completamente cerrado y capaz de aislar la radiación funcionando como una cavidad resonante.
Si se comprueba que esta tecnología funciona, podría usarse para propulsar vehículos en cualquier forma de viaje, incluyendo transporte terrestre, marítimo, submarino, aéreo y espacial.
En 2016 aún se discute si el aparato es realmente un nuevo aparato de propulsión, o si los resultados experimentales son simplemente malinterpretaciones de efectos espurios mezclados con errores experimentales.
[9] Si bien el efecto Unruh ha conseguido predecir varios fenómenos físicos, no es una teoría aceptada por la mayoría de la comunidad científica.
En mayo de 2015 la NASA se apresuró a desmentir que estuvieran trabajando en un proyecto para generar un motor como el EM Drive que desafíe las leyes de la física, tachando el dispositivo como algo «imposible».
A principios de este año, un empleado confirmó el equipo estaba trabajando en el documento que detallará los resultados.
Un artículo publicado en el AIP Avances sugiere que el EmDrive produce un escape como cualquier otro cohete.
Su teoría sugiere que el escape producido por el EmDrive está ahí, pero simplemente no se puede ver.
En aceleraciones extremadamente pequeñas, las longitudes de onda llegan a ser demasiado grandes para caber en el universo observable.
Se proporciona empuje a una nave espacial por el rebote de las microondas alrededor en un recipiente cerrado.