Fueron las únicas elecciones presidenciales en Portugal donde el ganador se decidió en segunda ronda.
Se presentaron como candidatos presidenciales Diogo Freitas do Amaral (apoyado por el CDS y también por el PSD), el ex primer ministro Mário Soares (apoyado por el PS), la ex primera ministra Maria de Lourdes Pintasilgo (la única mujer, hasta la actualidad, que ha sido candidata a presidente), Francisco Salgado Zenha (que contó con el apoyo del presidente del PRD y presidente de la República, António Ramalho Eanes, así como de algunos miembros del PCP, cuyo candidato (Ângelo Veloso) renunció a favor de Francisco Salgado Zenha).
[5][6][7][5] Aunque Freitas do Amaral ganó en todo el país, excepto en el Alentejo y la península de Setúbal (donde el candidato más votado fue Francisco Salgado Zenha), fue, sin embargo, Mário Soares, quien pasó a la segunda ronda, junto con Freitas do Amaral.
En la segunda ronda, Mario Soares logró obtener los votos de los otros candidatos de la izquierda (Zenha y Pintasilgo).
[5] Mário Soares declaró, para poner fin a las divisiones, ser «el presidente de todos los portugueses», una frase que desde entonces ha entrado en el discurso político nacional.