El sombrero de tres picos (novela)

Creyendo haber sido deshonrado, piensa en matar a los adúlteros, pero luego planea una venganza mejor.

Cambia sus ropas por las del corregidor y se dirige a casa de este para devolverle la afrenta.

Al día siguiente, el corregidor, Garduña y Frasquita se presentan en la casa del primero.

Frasquita demuestra su inocencia ante el tío Lucas, apelando al testimonio de sus dos burras.

La corregidora explica su artimaña para reconducir la venganza del tío Lucas y afea la conducta a su marido.