El retrato (en ruso, Портрет, transliterado como Portret) es una novela corta (póvest) escrita por Nikolai Gógol.
El protagonista, Andréi Petróvich Chartkov, es un pintor de 22 años que es descrito como un artista modesto y concentrado en su trabajo, pero pobre, que vive en un modesto cuarto alquilado en la isla Vasílievski ubicada en San Petersburgo, Rusia.
En ese retrato había pintado un anciano en una túnica amplia que recuerda a un hombre asiático, cuyos ojos parecen tener vida porque fueron pintados terriblemente realistas e intimidan a todos los observadores.
Distraen a Chartkov de su tarea que se ha autoimpuesto, es decir, del arte.
Su obra es impecable, agradable, divina y refleja el alma pura del autor.
Los nombres en las obras de Gógol nunca son elegidos por causalidad sino conscientemente.
Recuerda чёрт transliterado chort que significa diablo o recuerda a los lexemas чарки y чары transliterado como charki y chary que significa magia u obcecación.
El pintor B..., hijo del artista que pintó el retrato, contó la historia durante una subasta de arte.
Todos los que le piden dinero a préstamo enloquecen y mueren de la manera más terrible, como le ocurriría a Chartkov posteriormente, historia relatada en la primera parte de la novela.
El usurero pide al padre del pintor B... que le haga su retrato antes de su muerte.
El pintor, un hombre honrado y justo, cayó en una previamente desconocida envidia contra sus colegas.
Gógol, sin embargo, tenía la capacidad de ver la maldad en la vida cotidiana, para descubrirla en las cosas más pequeñas.