Durante su reunión, dos oficiales de la Cruz Flechada entran a tomar una copa.
Después de irse, el grupo se refiere amargamente a ellos como asesinos.
Uno de los amigos, un relojero llamado Miklós Gyuricza (Lajos Öze), plantea una pregunta moral a János (Sándor Horváth) sobre dos personajes hipotéticos; Tomóceusz, Katatiki y Gyugyu.
El fotógrafo dice que elegiría a Gyugyu, pero los demás no le creen.
Molesto porque los cuatro asistentes al bar no le creyeron sobre Gyugyu, el fotógrafo denuncia a los cuatro al Partido de la Cruz Flechada por llamar "asesinos" a los oficiales de la Cruz Flechada.