El ballet fue calificado como "un milagro" en una crítica de Time Out New York.
Sin embargo, también ha sido despreciado por algunos de los que se resisten a los cambios en los estándares clásicos del ballet ruso.
Su madre entra a reconfortarlo, pero al ponerse nerviosa por la intimidad de la situación se marcha, mirando por encima del hombro con indecisión.
A este Príncipe ya adulto le presentan una chica desgarbada llamada "la Novia".
La cuarta escena nos muestra al Príncipe enfadado, bebiendo delante de un espejo en sus aposentos, lo que sorprende a su madre.
En ese momento es cuando llega el hijo de von Rothbart,[4] carismático y sexualmente agresivo, vestido con pantalones de cuero negro: que intensifica incluso más la tensión sexual al flirtear con toda mujer presente, incluida la Reina.
Pero el Príncipe, en un pas de deux también intenta acercarse al joven von Rothbart, solo para ser despreciado.
El Príncipe se refugia en su propia mente y se imagina una danza íntima con él, pero la confusión del Príncipe disturba la fantasía; y los movimientos del hijo cambian rápidamente de eróticos a violentos.
Sobrecogido por sus sentimientos encontrados, el Príncipe saca una pistola y amenaza con disparar a su madre.
Le entrega la pistola que ha cogido del Príncipe a su padre, mientras ambos ríen.
Después la Reina encuentra el cuerpo muerto de su hijo y rompe a llorar.
Sin embargo, es en la muerte donde el Príncipe y el Cisne pueden estar juntos; vemos una escena sobre la acción principal que muestra al Cisne abrazando al joven Príncipe del Acto Primero.
El lago de los cisnes original se basada en la historia de Ondina, un mito con un tema común en el Romanticismo que fue adaptado por Hans Christian Andersen para su historia La sirenita.
Ondina era una hermosa e inmortal ninfa acuática, y la única amenaza a su felicidad eterna consistía en que si se enamoraba de un mortal y tenía un hijo suyo perdería su inmortalidad.
Cuando entró al establo, vio a Sir Lawrence yacendo en brazos de otra mujer.
Despertó a su marido a patadas y lo maldijo de tal manera que tendría aliento mientras permaneciera despierto, pero si alguna vez se dormía su aliento se perdería y el moriría.
La historia tiene un doble filo: el protagonista humano, al amar a la ninfa, transgrede contra su propia especie y puede ser castigado.